IDEAL JAEN
El líder de los socialistas no dimite, pero convoca un congreso extraordinario para el 19 y 20 de julio
Anuncia que hasta que se produzca el relevo ejercerá de secretario general del partido y jefe de la oposición
Las primarias abiertas quedarán en manos de la nueva dirección, en la que será clave el poder de Susana Díaz
Alfredo Pérez Rubalcaba se rinde, pero no se irá de manera inmediata. Dejará la secretaria general del PSOE en un Congreso extraordinario que tendrá lugar el fin de semana del 19 y 20 de julio. Y eso deja el calendario de las primarias abiertas, en las que estaba previsto elegir al candidato a la presidencia del Gobierno, en el aire. El líder de la oposición aseguró que el proceso seguirá adelante, pero será una nueva dirección la que diga la última palabra.
El catastrófico resultado de las elecciones europeas, en los que los socialistas han comprobado que su suelo se desmorona, ha puesto patas arriba a la formación. Andalucía ha sido clave en esta solución provisional. Susana Díaz es la dirigente territorial que mejor ha aguantado la embestida de la desafección ciudadana y a pesar de que también en su territorio el porcentaje de voto ha caído en trece puntos respecto a 2009, el PSOE-A ha roto la racha de derrotas frente al PP iniciada en las municipales de 2011. El orden estipulado -primero congreso, después primarias- tiene mucho que ver con sus posiciones.
La decisión no gustará a todos, ni mucho menos. La que fuera rival de Rubalcaba en el Congreso de Sevilla, Carme Chacón, ya anticipó su criterio a través de un tuit mientras la ejecutiva de reunía a puerta cerrada para analizar lo sucedido. "Sólo si primero nos abrimos a la sociedad, la sociedad se abrirá a nosotros. El cambio empieza por nosotros", advirtió.
Rubalcaba ha argumentado que esta es la "mejor decisión". "Debe ser una nueva dirección la que continúe los trabajos". "Se trata -ha dicho- de asumir responsabilidades políticas por un resultado malo sin paliativos. Esta dirección no debe ser la que organice (las primarias). Los ciudadanos nos están mirando y se preguntan ¿aquí no va a pasar nada?".
El aún líder de la oposición ha revelado que, en realidad, ya tenía tomada la decisión de no presentarse a las primarias hace tiempo y que sólo se lo había comunicado a tres personas: Felipe González, la vicesecretaría general, Elena Valenciano, y el secretario de Organización, Óscar López. Sólo Valenciano, cabeza de cuartel en estos comicios, le ha acompañado durante la comparecencia pero él ha asegurado no sentirse abandonado. "Me siento perfectamente acompañado".
Rubalcaba ha achacado el varapalo a la crisis económica, política y territorial "que ha afectado a los dos partidos que encarnan el sustento de este sistema político que los ciudadanos quieren que cambie". Y ha advertido al PP de que se equivocará si no hace esa reflexión. Él ha asegurado que su partido ya lo entendió así en las generales aunque sea "evidente" que el electorado no lo ha visto suficiente. "Tenemos un proyecto a medias que espero que la nueva dirección continúe y complete".
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