LA PROVINCIA DE LAS PALMAS
El presidente del Cabildo insiste en que las compensaciones a los afectados debe asumirlas el Gobierno canario - Emplaza a PSOE y CC a decir si están en contra
Vista aérea del Faro, el Oasis y la Charca de Maspalomas, en San Bartolomé de Tirajana. | yaiza socorro
El presidente del Cabildo de Gran Canaria, José Miguel Bravo de Laguna, adelantó ayer que no cuantificará el coste económico de la declaración del Oasis de Maspalomas como Bien de Interés Cultural (BIC), tal como le reclama el Gobierno de Canarias, porque considera que las posibles indemnizaciones no se pueden establecer en el expediente que se tramita actualmente, sino en un posterior plan especial. En cualquier caso, Bravo de Laguna insistió en que es el Ejecutivo autonómico el que tendría la responsabilidad de compensar a las entidades afectadas, ya que es el que tiene la última palabra sobre el BIC.
Ante la devolución del expediente al Cabildo para que incluya una valoración económica de la declaración del BIC, el presidente insular descartó contestar a ese requerimiento. "Aún no tenemos el borrador de la respuesta, pero ya anticipo que no vamos a poner ninguna cifra de hipotéticas indemnizaciones porque, entre otras cosas, entendemos que no hay indemnizaciones que fijar", puntualizó.
El presidente insular dijo que, "de momento", hace una lectura administrativa, no política, de la decisión de la consejera regional de Cultura, Inés Rojas, de devolver el expediente al Cabildo. "Parto de la base de que el Gobierno de Canarias entiende que hay determinadas observaciones que deben ser contestadas", señaló Bravo en referencia a la solicitud de aclaraciones sobre las indemnizaciones, los recursos judiciales pendientes de resolver y la falta de notificaciones a algunos de los afectados.
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